Research
Hay cada vez más fundamentos científicos para comprender el funcionamiento óptimo y positivo del ser humano. El profesor Mihaly Csikszentmihalyi, psicólogo de origen húngaro y cofundador de la psicología positiva, y sus colaboradores han señalado que el «flujo» es una fuerza positiva que promueve el funcionamiento óptimo. La innovadora investigación de la galardonada profesora de psicóloga positiva Barbara Fredrickson y su equipo ha demostrado que las emociones positivas pueden ser el elemento activo más importante para lograr el florecimiento del ser humano.
Descubrimientos sobre el flujo
- El flujo es una fuerza positiva que promueve el rendimiento y desarrollo óptimos de las habilidades y produce una sensación intensa de disfrute.
- El flujo es un estado de concentración profunda en la tarea, eficiencia cognitiva y disfrute intrínseco que hace que las personas se sientan plenas con la actividad que están realizando.
- El flujo equivale a una motivación totalmente enfocada.
- Las personas que se encuentran en estado de flujo trabajan para dominar la actividad que están realizando.
- Se comprobó que existe una fuerte correlación entre el flujo y la mejora del rendimiento en diversos ámbitos.
- Las experiencias de flujo aportan crecimiento personal y una mayor sensación de competencia y eficacia.
- Las personas experimentan más flujo en el trabajo que en el hogar.
- Las personas que experimentan un alto nivel de flujo se sienten más motivadas y son más creativas en el trabajo y en las actividades recreativas que aquellas que no lo experimentan.
Descubrimientos sobre el emociones positivas
- Las emociones positivas transforman a las personas y los equipos.
- Los estudios sobre el funcionamiento de los equipos de negocios estratégicos han determinado que los equipos que tienen un alto nivel de emoción positiva son más receptivos y curiosos, se apoyan mutuamente y desarrollan mejores ideas y soluciones. Esto, a su vez, promueve los recursos del equipo, lo cual aumenta directamente la productividad, rentabilidad y satisfacción del cliente.
- Las emociones positivas amplían nuestra manera de pensar y actuar: prestamos más atención, somos más creativos y alegres, y mantenemos relaciones interpersonales más flexibles y receptivas.
- Las emociones positivas amplían el espectro de atención y conocimiento y, por lo tanto, inician una espiral ascendente que incrementa el bienestar emocional.
- Las emociones positivas generan recursos psicológicos, tales como la resiliencia, la capacidad de adaptación, las habilidades físicas, la inteligencia emocional, las habilidades sociales y el autocontrol, que se vuelven útiles con el tiempo.
- Las emociones positivas pueden “neutralizar” los efectos del estrés.
- Las personas que experimentan emociones positivas son menos propensas a manifestar prejuicios raciales.