Research

Hay cada vez más fundamentos científicos para comprender el funcionamiento óptimo y positivo del ser humano. El profesor Mihaly Csikszentmihalyi, psicólogo de origen húngaro y cofundador de la psicología positiva, y sus colaboradores han señalado que el «flujo» es una fuerza positiva que promueve el funcionamiento óptimo. La innovadora investigación de la galardonada profesora de psicóloga positiva Barbara Fredrickson y su equipo ha demostrado que las emociones positivas pueden ser el elemento activo más importante para lograr el florecimiento del ser humano.

Descubrimientos sobre el flujo

1. El flujo es una fuerza positiva que promueve el rendimiento y desarrollo óptimos de las habilidades y produce una sensación intensa de disfrute.
2. El flujo es un estado de concentración profunda en la tarea, eficiencia cognitiva y disfrute intrínseco que hace que las personas se sientan plenas con la actividad que están realizando.
3. El flujo equivale a una motivación totalmente enfocada.
4. Las personas que se encuentran en estado de flujo trabajan para dominar la actividad que están realizando.
5. Se comprobó que existe una fuerte correlación entre el flujo y la mejora del rendimiento en diversos ámbitos.
6. Las experiencias de flujo aportan crecimiento personal y una mayor sensación de competencia y eficacia.
7. Las personas experimentan más flujo en el trabajo que en el hogar.
8. Las personas que experimentan un alto nivel de flujo se sienten más motivadas y son más creativas en el trabajo y en las actividades recreativas que aquellas que no lo experimentan.

El profesor Mihaly Csikszentmihalyi, cofundador de la psicología positiva, con el fundador de Hungry 4 Learning Ltd., Paul Pahil.

Descubrimientos sobre el emociones positivas

1. Las emociones positivas transforman a las personas y los equipos.
2. Los estudios sobre el funcionamiento de los equipos de negocios estratégicos han determinado que los equipos que tienen un alto nivel de emoción positiva son más receptivos y curiosos, se apoyan mutuamente y desarrollan mejores ideas y soluciones. Esto, a su vez, promueve los recursos del equipo, lo cual aumenta directamente la productividad, rentabilidad y satisfacción del cliente.
3. Las emociones positivas amplían nuestra manera de pensar y actuar: prestamos más atención, somos más creativos y alegres, y mantenemos relaciones interpersonales más flexibles y receptivas.
4. Las emociones positivas amplían el espectro de atención y conocimiento y, por lo tanto, inician una espiral ascendente que incrementa el bienestar emocional.
5. Las emociones positivas generan recursos psicológicos, tales como la resiliencia, la capacidad de adaptación, las habilidades físicas, la inteligencia emocional, las habilidades sociales y el autocontrol, que se vuelven útiles con el tiempo.
6. Las emociones positivas pueden “neutralizar” los efectos del estrés.
7. Las personas que experimentan emociones positivas son menos propensas a manifestar prejuicios raciales.

La profesora Barbara Fredrickson y Paul Pahil en la Conferencia del CAPP en abril de 2009.